Infraestructura en data center empresarial: niveles TIER III y IV ¿Qué elige tu empresa?

Rack de servidores en un data center empresarial de alta disponibilidad

Los centros de datos forman la columna vertebral de la tecnología actual, por lo que su diseño y fiabilidad son clave para las empresas. La clasificación TIER es un sistema desarrollado por el Uptime Institute que categoriza los centros de datos en cuatro niveles (De Tier I a Tier IV) según su redundancia, seguridad y disponibilidad.

A mayor nivel TIER, más complejo y tolerante a fallos es el centro. Por ejemplo, un Tier I básico garantiza alrededor de 99.671% de uptime (casi 28,8 horas de inactividad al año), mientras que un Tier IV alcanza hasta 99.995% de disponibilidad. Estos estándares (incluidos en la norma ANSI/TIA-942) ayudan a las empresas a evaluar la fiabilidad de la infraestructura física en la que se alojan de sus datos.

Nivel de disponibilidad

TIER I: 99.671% anual = Infraestructura básica, sin redundancia.

TIER II: 99.741% anual = Redundancia parcial (energía, refrigeración).

TIER III: 99.982% anual = Redundancia total y mantenimiento sin interrupciones.

TIER IV: 99.995% anual= Tolerancia total a fallos. Todo es redundante: energía, red, climatización.

 

¿Qué son los niveles TIER en un data center?

Cada nivel TIER define la resistencia ante fallos y el tiempo de actividad (uptime) garantizado:

TIER III – Centro de datos concurrentemente mantenible

Los centros Tier III permiten realizar mantenimiento continuo sin interrumpir el servicio. Esto se consigue mediante:

  • Redundancia N+1 en energía y refrigeración, con rutas duales.
  • Mantenimiento concurrente: cualquier componente puede sustituirse mientras el centro permanece activo.
  • 99,982% uptime (≈1,6 horas de inactividad anuales).

Arquitectura y redundancia

  • Dos fuentes de alimentación independientes, cada una con su UPS y generador.
  • Sistemas de enfriamiento duplicados.
  • [ENLACE INTERNO: Infraestructura IaaS de Luma Cloud]

En resumen, el Tier III garantiza alta disponibilidad sin gastos excesivos. Ofrece un muy buen nivel de performance y seguridad operativa. Tier III es normalmente el punto de partida profesional para soportar cargas de trabajo vitales, ya que permite escalar al siguiente nivel (Tier IV) en el futuro sin interrupciones importantes.

TIER IV – Centro de datos tolerante a fallos

En la clasificación de data center empresarial más exigente, un Tier IV ofrece:

  • Redundancia 2N+1, sin puntos únicos de fallo.
  • 99,995% uptime (≈26 min de inactividad anuales).
  • Capacidad para soportar fallos simultáneos en múltiples componentes.

Casos de uso recurrente en los sectores empresarial

  • Finanzas: [DS5] Transacciones financieras de alta frecuencia
  • Hospitales y atención sanitaria: Plataformas de salud y emergencias
  • Seguridad de la información: Centros de investigación con datos irremplazables
  • Transporte: Operaciones nacionales, internacionales y continentales de gran alcance
  • Construcción: Plataformas BIM, (Building Information Modeling -entorno digital colaborativo de un proyecto de construcción), gestión de proyectos en tiempo real y sistemas de monitoreo de obras sin interrupciones.
  • Industria manufacturera: Soporte continuo a procesos de automatización, robótica, control de inventarios y cadenas de suministro
  • Tecnología: Operación de servicios en la nube, aplicaciones críticas, centros de datos y plataformas digitales que requieren disponibilidad máxima.

Los centros Tier IV tienen máxima escalabilidad y fiabilidad. Se conectan a múltiples líneas de distribución eléctrica y de enfriamiento, con sistemas de generación y enfriamiento duplicados. Esto garantiza operación continua incluso ante fallos simultáneos. Tier IV es recomendado para grandes corporativos que requieren disponibilidad sin concesiones.

Beneficios de centros Tier III y IV

Los niveles Tier III y IV representan el estándar de fiabilidad para servicios críticos. Sus ventajas clave incluyen la capacidad de realizar mantenimientos sin interrupciones y ofrecer redundancia completa. En términos prácticos, esto se traduce en minimizar riesgos de caída que afectarían a clientes o procesos sensibles. Además, operar en centros Tier III/IV permite cumplir normativas de seguridad y estándares de calidad exigidos en sectores regulados.

Integrar esta infraestructura con servicios avanzados maximiza el beneficio. Por ejemplo, Luma Cloud combina su Infraestructura IaaS y VPS con data centers certificados Tier III y IV, garantizando que las aplicaciones de sus clientes funcionen con alta disponibilidad. Asimismo, complementa esta infraestructura con ciberprotección integral y medidas de monitoreo continuo para mantener la resiliencia ante ataques o fallos. En conjunto, operar sobre Tier III/IV ofrece la base técnica para servicios en la nube escalables y seguros.

En Luma Cloud se garantiza infraestructura robusta y continua, respondiendo a las necesidades críticas de los clientes. Para más información sobre soluciones de nube y cómo aprovechar los beneficios de los centros Tier avanzados, contáctenos.

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